TRANSFORMA TU ESTRES

Ascender a un puesto directivo es un proceso que dura varios años, tiempo en el cual hombres y mujeres, deben prepararse para ello. En particular las mujeres, quienes empiezan a asumir posiciones directivas, pero cuya incorporación a la llamada C-suite ha sido lenta y difícil, son pocos los países, como en el caso de Noruega, cuya participación laboral femenina es 20% superior al de la Unión Europea, y cuyas mujeres ocupan el 40% de sus consejos directivos y en el mismo porcentaje tienen una representación en el parlamento.  En America Latina, sólo el 5% de los altos cargos están desempeñados por mujeres. Y es entonces cuando nos preguntamos: qué les decimos a nuestras hijas cuando son pequeñas?  Las preparamos para ese momento, en el cual puedan llegar a ser directoras de una empresa o incluso lleguen a ocupar una posición como Cristina Kirstchner, Dilma Rousseff, Angela Merker, Julia Gillard, es decir, presidentas de su país? O les decimos que son R...

No cabe duda que después del trabajo, el ser padre/ madre es quizá una de las facetas más estresantes de nuestras vidas. Y es que a diferencia de nuestros padres, hoy día quienes somos padres y madres nos enfrentamos a situaciones antes insospechadas, nuevos retos, que implican una mayor atención, dedicación y tiempo,  entre las cuales podemos enlistar: - Cambios en la manera de educar a nuestros hijos: muchos de nosotros fuimos educados en el autoritarismo y la imposición, y ahora algunos pretendiendo ser amigos de sus hijos, caen en el extremo opuesto, en el laissez faire (dejar hacer) y la falta de límites. El punto medio puede ser para algunos, difícil de encontrar. - Cambios en la estructura familiar: la familia nuclear de antaño, compuesta por el papá, la mamá, y los hijos, hoy día se transforma dando lugar a Familias Uniparentales, es decir, en las que solo existe la mamá, o el papá, Familias Mixtas, en las que se integran los hijos del papá, los hij...

Que existen cosas que nos desagradan en la vida como la violencia, la injusticia, la pobreza, es cierto. Que nos suceden cosas a veces no tan agradables como quedarnos sin empleo, atravesar por una enfermedad, o un conflicto con un ser querido también. No obstante, si pasamos mucho tiempo pensando en este tipo de situaciones, para las que a veces no tenemos respuesta, entraremos en estrés, ansiedad, depresión e incluso, estos cuadros emocionales pueden impactar nuestra salud física, con lo que tendremos, un problema adicional. Qué pasaría entonces, si en vez de voltear a ver todo lo malo, desafortunado, triste, que ocurre en nuestra vida y el mundo, miramos también las cosas positivas: el despertar, el estar vivos, el tener una familia o un trabajo, que en ocasiones sin ser el ideal, es un trabajo que nos permite satisfacer ciertas necesidades, nuestros alimentos, etc. Todo ello resultaría, como te hemos señalado ya en otras ocasiones, en un mayor bienestar, en una mejor sa...